Todos los centros escolares de las Hermanas Franciscanas Hijas de la Misericordia aplican en su día a día actividades encaminadas a fomentar una cultura de trabajo personal para cultivar la atención a la interioridad.
Con esta iniciativa, los CSFA completan el proceso educativo del alumnado con la integración de un nuevo ámbito, basado en el desarrollo de la identidad personal, siempre desde una doble perspectiva: el autoconocimiento e identificación del “yo” de manera personal, y sus consecuencias en el entorno en el que nos movemos.
En el día a día del aula se integran acciones que tienen por finalidad que el alumnado encuentre espacios para crecer como ser independiente, al tiempo que social, estableciendo pautas para que ambas dimensiones circulen en la misma dirección.
Como referentes de las enseñanzas de San Francisco de Asís, trabajamos para integrar un desarrollo humano sano y libre, capaz de aportar a la sociedad lo mejor de cada uno, dedicando especial atención a los más desfavorecidos y siempre con el respecto a la naturaleza como premisa imprescindible.
Nuestra voluntad es contribuir a que los niños y jóvenes de nuestras escuelas puedan aportar, como miembros activos de la sociedad, ahora y a lo largo de su vida adulta, elementos diferenciadores en positivo, entre otros: sencillez, justicia, misericordia, solidaridad y alegría.