Acepta el reto de ser persona
Se acepta a sí mismo desde sus posibilidades y limitaciones.
Es acogedor, dialogante y sencillo.
Tiene una actitud positiva frente a la vida y todo el que le rodea.
Formado y de profundas convicciones
Asume los retos de la cultura actual
Conoce y analiza la realidad con espíritu crítico y reflexivo.
Da respuestas adecuadas y originales.
Se compromete en la transformación de la realidad.
Equilibrado afectivamente y psíquicamente
Valora y vive la relación familiar.
Ama y se siente amado.
Vive en armonía consigo mismo.
Tiene unidad interna y externa.
Es capaz de hacerse persona y de interrogarse.
Busca y da sentido a su vida.
Capaz asumir seriamente la responsabilidad
Esfuerzo personal y responsabilidad en el trabajo.
Afronta las situaciones con autenticidad, serenidad y actitud crítica.
Colabora con los demás.
Sensible y abierto a las personas y a sus necesidades
Solidario frente a situaciones concretas de la vida.
Se expresa como “ser en relación”.
Sentido de compromiso.
Actitud de servicio.
Se reafirma en su identidad cuando permanece abierto al otro.
Valora ante todo la persona y su entorno
Actitud de respecto a la vida en todas sus manifestaciones.
Compromiso por la paz y la justicia.
Respeta y ama a los demás.
Aprecia y cuida la naturaleza y el medio ambiente.
Abierto a la trascendencia
Investiga la Verdad.
Integra fe-cultura-vida.
Se identifica con la Persona y el Mensaje de Jesús de Nazaret
Vive la afiliación y la fraternidad.
Motivado a vivir los valores de las Bienaventuranzas.